«Paz en el país, paz en el mundo», se lee en el basamento al busto de Mustafa Kemal Atatürk, líder independentista turco, develado este jueves en Avenida del Puerto y Peña Pobre, por Haydar Berk, viceministro de Asuntos Exteriores de Turquía, Sanivar Kizildili, embajadora de esa nación en Cuba y Eusebio Leal, Historiador de la Ciudad de La Habana.

 A la memoria del ilustre patriota, primer presidente turco, fue dedicada esta obra emplazada en los Jardines del Anfiteatro de La Habana.

En Avenida del Puerto y Peña Pobre, en la Habana Vieja, se erige el busto a Mustafa Kemal Atatürk, quien como primer presidente de la República de Turquía, introdujo una variedad de reformas de gran alcance que procuraron establecer un Estado moderno, democrático y secular.

Frente a las aguas de la rada habanera, en las inmediaciones del Anfiteatro del Centro Histórico, fue develado este jueves un busto de Mustafa Kemal Atatürk, fundador de la República de Turquía.
«Paz en el país, paz en el mundo», fundamento esencial del líder turco, puede leerse en el basamento a su escultura descubierta en presencia de Haydar Berk, viceministro de Relaciones Exteriores de Turquía; Sanivar Kisiloeli, embajadora de ese país en Cuba; Eusebio Leal Spengler, Historiador de la Ciudad; Ernesto Gómez Abascal, jefe de la misión de Cuba en Ankara; miembros del Cuerpo Diplomático, funcionarios de la cancillería cubana y del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos.
En su intervención, el vicecanciller Berk significó los importantes cambios acaecidos en Turquía bajo la dirección de Mustafá Kemal, a quien calificó como uno de los hombres más futuristas de la historia de su país.
«Este monumento será una inspiración para las futuras generaciones de ambos países, un símbolo del cariño y la amistad entre los pueblos de Cuba y Turquía, una manera de cultivar en la Isla el legado de Atatürk», afirmó.
Para el orador, un pueblo como el cubano del cual surgieron José Martí y Fidel Castro, «podrá apreciar profundamente el valor de Atatürk y su legado para la nación turca, así como el concepto de independencia que heredamos de él y de Martí, un elemento que une a nuestras naciones».

Instantes de la ceremonia de develación presidida —de izquierda a derecha— por el Historiador de la Ciudad, Eusebio Leal Spengler; la embajadora de Turquía en Cuba, Sanivar Kizildeli, y Haydar Berk, viceministro de Asuntos Exteriores de Turquía quien encabeza la misión de visita en La Habana.

Por su parte la embajadora Kisiloeli, agradeció a todos los que hicieron posible la colocación de la estatua, y por su ubicación en un lugar desde donde se divisara el mar que tanto gustaba a este hombre imprescindible dentro de la historia turca, que concedía mucha importancia al arte y a los artistas.
El Historiador de la Ciudad, alegó cómo el levantar nuevos monumentos es un noble oficio y una apelación continua a la memoria. Según sus palabras «todos ellos rinden tributo a virtudes, a hombres y mujeres, a naciones, a culturas, que han contribuido a formar el mejor ideal humano».
Al comentar su satisfacción porque también se halle en el corazón de la Habana antigua el busto de Mustafa Kemal Atatürk a quien definió como «un maestro, un humanista, un vencedor. Alguien que creó la nueva, grande y noble nación turca», Leal expresó:
«Bienvenido el maestro que supo creer en los valores de la cultura, en el sentido positivo y creativo de la intelectualidad, en el valor de la singularidad dentro de la pluralidad,  en la necesidad de sentar las bases de un Estado nuevo y moderno sobre los cimientos de una poderosa voluntad que otrora asombró al mundo».
Nacido el 12 de marzo de 1881, en Salónica (actualmente Tesalónica, en Grecia), Mustafa Kemal comenzó a estudiar a los doce años en las escuelas militares de Salónica y Monastir, centros nacionalistas griegos y eslavos antiturcos. En 1899 asistió a la Academia Militar de Estambul. Allá se graduó como capitán del Estado Mayor en enero de 1905.

Mustafa Kemal Atatürk (1881-1938), hasta 1934 Gazi Mustafa Kemal Paşa, fue un oficial del ejército turco y célebre estadista así como el fundador y primer presidente de la moderna República de Turquía. Sus brillantes campañas militares condujeron a la liberación del país y el establecimiento de la República de Turquía.

Por sus actividades en el movimiento secreto Jóvenes Turcos contra el gobierno del Imperio Otomano, fue destinado a Siria, donde fundó la sociedad secreta Patria y Libertad (1906). Al año siguiente en Salónica reunió el Comité de Unión y Progreso (CUP), que llevó a cabo la revolución de los Jóvenes Turcos en julio de 1908. En los años 1911-1912 luchó en Libia contra Italia y resultó ascendido a general en noviembre de 1911; organizó la defensa de los Dardanelos durante la guerra de los Balcanes (1912-1913) y se desempeñó como agregado militar en Bulgaria en octubre de 1913.
El 15 de mayo de 1919 el ejército griego ocupó Izmir en la costa de Anatolia, y masacró a la población local. Atatürk, que era inspector del Tercer Ejército en Anatolia, llegó a Samsun el 19 de mayo, allí promovió la unidad del movimiento nacional turco y creó un ejército que se hiciera cargo de la defensa. El primero de noviembre de 1922, se abolió el sultanato, y el 29 de octubre de 1923, cuando se proclamó la República de Turquía, se convirtió en presidente. Meses atrás (agosto de 1923) había fundado el Partido Popular (renombrado como Partido Republicano del Pueblo en 1924) y establecido un régimen unipartidista que duró hasta 1945.
Mustafa Kemal Atatürk creó un moderno Estado laico e introdujo un amplio programa de reformas como la abolición del califato, que suponía la autoridad religiosa de los sultanes y todas las demás instituciones islámicas, asimismo eliminó en 1928, la disposición constitucional que designaba al Islam como la religión oficial. Implantó el alfabeto latino e introdujo los códigos penales, la indumentaria y el calendario occidentales.
Asimismo el nuevo Código Civil, adoptado por el gobierno de Mustafa Kemal en 1926, abolió la poligamia y reconoció la igualdad de derechos de las mujeres en cuanto al divorcio, la custodia de los hijos, y la herencia; el sistema educativo en su conjunto, desde la escuela primaria hasta la universidad, brindó las mismas oportunidades, tanto a hombres como a mujeres.
El líder turco consideró y alabó la importancia vital de las mujeres en la sociedad, por ello realizó numerosas reformas para concederles la igualdad de derechos y oportunidades, que no habían podido disfrutar durante el Imperio Otomano.
Falleció en Estambul el 10 de noviembre de 1938.

 Karín Morejón Nellar
Opus Habana