Durante septiembre y hasta el primero de octubre, está abierta la exposición «Unidos por la fantasía», realizada por —y para— niños en la sala transitoria del Centro Cultural Vitrina de Valonia. Esta muestra sirve de colofón al taller de historietas para niños, impartido por Yury Díaz Caballero (profesional del género) durante el finalizado curso escolar 2009-2010. En las historias percibimos como leit motiv los lazos que unen a los pueblos belga y cubano. Temáticas como el chocolate, el art nouveau y personajes representativos del cómic de ambos países se combinan con preocupaciones infantiles sobre los sueños, la amistad y el amor, en la creatividad de estos escolares.
 Bajo el título «Con la memoria», está a disposición del público en la galería del Centro Cultural Cinematográfico Fresa y Chocolate (Calle 23 entre 10 y 12, Vedado), la más reciente exposición personal del artista de la plástica Reynier Ferrer, quien se unió al reconocido novelista Edmundo Desnoes, su tío, para crear «una imaginería visual sobre la base de nomenclaturas previamente entregadas por Edmundo, o bien éste erigía el tropo desde la escritura partiendo de las iconografías desplegadas por aquél», al decir del crítico Píter Ortega en las palabras al catálogo. La idea fructificó gracias a la estrecha relación que entablaron a través de una sostenida correspondencia electrónica.
 Mañana 18 de septiembre, se cumplen 30 años del viaje espacial conjunto protagonizado por los cosmonautas Arnaldo Tamayo Méndez y Yuri Romanenko, hazaña recordada de manera permanente en el Planetario del Centro Histórico, en una de cuyas salas expositivas —con textos e imágenes— se reseña el hecho. La permanencia de ambos en el espacio sideral permitió realizar una veintena de experimentos médico-biológicos, físicos y técnicos que, a decir de expertos, tuvieron alto rigor científico, con notables resultados y aplicaciones prácticas a corto plazo. Tamayo Méndez fue el astronauta número 97 que voló al espacio, y Cuba, el noveno país representado.