La tesis de opción al título académico de Máster en Conservación del Patrimonio Cultural, «Resultados de la aplicación de tratamientos de conservación a los cañones del Castillo de San Salvador de La Punta», fue defendida por el ingeniero químico Manuel Rolando Almeida Estévez en horas de la mañana del martes, 3 de diciembre, en el Museo Castillo de La Real Fuerza. Presidido por el insigne historiador César García del Pino, el jurado reconoció la trayectoria de Almeida en instituciones como el Gabinete de Arqueología de la Oficina del Historiador, a favor de la protección y restauración de las piezas de artillería correspondientes al período colonial habanero.
En los contextos arqueológicos de La Habana colonial, aun en los más antiguos que datan del siglo XVI, se encuentran frascos de farmacia, botes de tocador, fragmentos de platos, fuentes, jarros y botellas para vinos; piezas que el público puede apreciar, hasta octubre, en la muestra transitoria «Objetos franceses de La Habana colonial», inaugurada el miércoles, 24 de abril, en el Museo de Arqueología. Recuperadas por especialistas del Gabinete de Arqueología y del Grupo de Arqueología de la empresa Puerto Carenas, de la Oficina del Historiador, estos vestigios del pasado hoy forman parte de las colecciones del propio Museo, la Casa Víctor Hugo y la Farmacia Habanera.
«La fragata Navegador y su cargamento británico, arqueología e historia» es el título de la exposición que el próximo viernes, 5 de abril, a las 2:30 p.m., quedará abierta al público en el Museo Castillo de La Real Fuerza. Vajillas, cristalería, adornos, botones, compases y grifos de toneles son algunas de las piezas que serán exhibidas, entre otros objetos rescatados del pecio por arqueólogos subacuáticos y especialistas de la Oficina del Historiador. Construida en Estados Unidos a inicios del siglo XIX, la fragata cubría la ruta comercial entre Portsmouth y La Habana cuando naufragó en las inmediaciones de Cabo Chipiona, costa norte de la provincia de Mayabeque en 1814.