Una cosa es segura: el que por primera vez juegue Scrabble, quedará enamorado para siempre de este precioso juego.
La historia del Scrabble cumplió el 16 de diciembre 60 años de existencia, fecha conmemorada en el reciente torneo internacional celebrado en la capital cubana. Entre los días 4 y 7 de diciembre se realizó el evento en el Palacio Central de Computación, con la asistencia de 29 jugadores, 17 representando los colores patrios y 12 foráneos. |
Pues bien la historia del Scrabble no es una novedad, sino que exactamente el 16 de diciembre cumplió 60 años de existencia y precisamente el reciente torneo internacional celebrado en la capital cubana fue en conmemoración a esta fecha. Entre los días 4 y 7 de diciembre se realizó el evento en el Palacio Central de Computación, con la asistencia de 29 jugadores, 17 representando los colores patrios y 12 foráneos.
En Cuba la práctica del Scrabble es apenas conocida. Desde hace poco más de dos años, es que se vienen dando los primeros pasos serios para su organización y difusión a nivel nacional. En la actualidad existe un Grupo promotor de Scrabble que tiene su sede en la Biblioteca Pública Rubén Martínez Villena, y entre sus tareas principales está difundir la práctica del juego, así como enseñar a jugar a todo el que lo desee, es por ello que por la sala de la biblioteca desfilan numerosas personas de diferentes sexos y edades para aprender y conocer las interioridades, estrategias y tácticas del juego.
El Grupo promotor de Scrabble, comenzó su funcionamiento, gracias a la labor del Historiador de la Ciudad, el Doctor Eusebio Leal Spengler, que bajo su auspicio propició la sede, y de hecho se convirtió en su benefactor, al donar generosamente los primeros juegos y otros accesorios necesarios para su práctica. Cuando se le explicó al Dr. Leal el proyecto de Scrabble, su respuesta fue «...en defensa del idioma español, lo que sea necesario...», y precisamente es el Scrabble la herramienta apropiada para que todos los hispanos conozcamos mejor nuestro idioma, profundicemos nuestros conocimientos, mejoremos grandemente la ortografía y la gramática, además de pasar un rato de entretenimiento con familiares y amigos. En cada partida de Scrabble, siempre se aprende algo nuevo. De ahí su importancia, además evita que nuestros hijos pasen horas frente a los videos juegos, o ante la televisión. Una cosa es segura, el que por primera vez juegue Scrabble, quedará enamorado para siempre de este precioso juego.
Con el propósito de sistematizar su práctica se están dando pasos acelerados, para que todos los Joven Club del país, cuenten con Scrabble versión digital, e incluso puedan jugar on line entre los distintos clubes. El mayor beneficio de que el Palacio de Computación, haya sido la sede del torneo que acaba de finalizar, es que una gran multitud de jóvenes se hayan interesado por conocer la práctica de este novedoso juego para los cubanos.
Breve historia del scrabble A la izquierda, el campeón, Carlos Espinosa y a la derecha Javier Guerrero. De pie con una guayabera blanca el árbitro Fidel Babani León, autor del trabajo.
La creación del Scrabble se debe al genio del arquitecto norteamericano Alfred Mosher Butts, residente en el poblado de Poughkeepsie en Nueva York. Cuando la Gran Depresión quedó desempleado y entonces ideó crear un juego de mesa. Consideraba que los dados dependían siempre de la suerte y el ajedrez del conocimiento. Así, concibió crear un juego de mesa en el que se combinara la suerte y el conocimiento. A fines de 1931, tenía ya el proyecto inicial de lo que hoy se conoce como Scrabble, pero que él denominó Léxico. Al principio se jugaba sin tablero, y los jugadores anotaban los puntos obtenidos de acuerdo a la longitud de las palabras que formaban.
Alfred Butts, hizo un análisis riguroso de la portada del New York Times, y así pudo calcular la frecuencia de la aparición de las letras en su idioma y el valor de cada una de ellas. En 1933 solicitó una patente para su juego, pero le fue denegada. También le presentó su idea a dos fabricantes de juegos: Parker Brothers y Milton Bradley, recibiendo una negativa de ambos empresarios. Para 1938 había fabricado alrededor de 200 juegos, los que regaló o vendió a sus amigos y le introdujo un elemento innovador, el tablero. A su vez el nombre de Léxico, fue cambiado varias veces llamándose New Anagrams, Alph, Criss-Cross y por último Criss- Crosswords. Una vez más los fabricantes, tuvieron la desafortunada decisión de rechazar su propuesta. Con la llegada de la Segunda Guerra Mundial, Butts abandonó su proyecto hasta 1948. En este año James Brunot y su esposa que habían sido obsequiados por Butts con uno de los juegos fabricados por él, decidieron embarcarse en la aventura de comercializarlo, previa autorización del creador. El matrimonio hizo pequeñas modificaciones, como simplificar las reglas y reorganizaron las casillas de premios del tablero, además de bautizarlo con un nuevo nombre, de esta manera el primero de diciembre de 1948 nació lo que conocemos hoy como Scrabble, y el día 16 de ese mes fue registrado y se le concedió el Copyright (derecho de autor). El juego fue cogiendo auge en todo el país, si en 1952 solo se habían vendido 37 000 juegos, para 1953 las ventas habían ascendido hasta seis mil semanales. Tal fue la demanda que Brunot cedió la licencia de fabricación a la compañía líder en juegos Selchow and Righther, una de las que lo había rechazado años antes, los pedidos siguieron en aumento y durante tres años se tuvo que racionar la venta de Scrabble pues el fabricante era incapaz de satisfacerla. Después la licencia de fabricación pasó a W. Spears en 1968 y paradójicamente Milton Bradley en 1987 adquirió los derechos de Scrabble, 53 años después de haber rechazado la fabricación del juego.
En 1953 se lanzó el juego a la venta en Gran Bretaña, siendo un éxito de inmediato. El primer campeonato mundial de Scrabble en inglés se celebró en 1991 en Londres y el segundo en Nueva York en 1993. Madrid fue la cede del primer campeonato mundial en español en 1997 y el segundo tuvo lugar en México al año siguiente. Alfred Butts, asistió a la competición de Nueva York y quedó maravillado de lo lejos que había llegado su creación, este hombre modesto y sin pretensiones siguió jugando Scrabble con sus familiares y amigos hasta el fin de sus días en abril de 1993 a los 93 años de edad. James Brunot falleció en 1984, y no tuvo la suerte de ver celebrarse los torneos mundiales.
Existen tres campeonatos mundiales: en inglés, en español y en francés. En los torneos organizados juegan solo dos contrincantes, también hay torneos que se juega a dúos, pero las parejas separadas.
En qué consiste el Scrabble
El Scrabble es un juego de mesa, que puede ser jugado entre dos, y hasta cuatro personas. Básicamente, la esencia es formar palabras sobre un tablero. Cada jugador cuenta con siete fichas (cada ficha representa una letra, y cada letra tiene un valor), las que debe colocar en las casillas del tablero. Por cada palabra formada el jugador recibe una puntuación por el valor de las fichas colocadas, así como por la posición de la palabra dentro del tablero. Existen 61 casillas con premios, repartidas en premios por doble y triple tanto de letras y premios por doble y triple tanto de palabra. Si un competidor logra formar una palabra con las siete fichas que tiene en su poder y la puede colocar en el tablero, entonces se dice que ha hecho un Scrabble y recibe como premio 50 puntos. Esto sería como un gol en fútbol o un jonrón en el béisbol.
Lic. Fidel Babani León
Arbitro de Scrabble
Comentarios
Tengo una deuda de viajar a La Habana a jugar scrabble con todos ustedes. Mi problema de alergia se me ha complicado, pero queda en mi agenda el viaje.
El scrabble me enamoró en verano del 2005 y nos hicimos novios. Hoy es como la chica que nunca podré dejar. Scrabble es pasión, amor y droga. Es un pulmón de mi vida.
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