Una decena de exposiciones tuvieron lugar entre el 9 y el 15 de abril de 2012, como parte de la III Jornada Fotográfica Latinoamericana.
Esta fiesta de la fotografía del continente es parte de las acciones de un grupo de fotógrafos de la Oficina del Historiador de la Ciudad, encaminadas al desarrollo y promoción de este arte como medio para preservar la memoria visual de nuestro tiempo.
Una vez más, durante la primavera, el arte fotográfico «invadió» los espacios del Centro Histórico habanero. Una decena de exposiciones tuvieron lugar entre el 9 y el 15 de abril, como parte de la III Jornada Fotográfica Latinoamericana.
Convocada por la Casa Museo Simón Bolívar y auspiciada por la Oficina del Historiador de la Ciudad (OHC) a través de la Dirección de Gestión Cultural, esta fiesta de la fotografía del continente es parte de las acciones de un grupo de fotógrafos de la OHC, encaminadas al desarrollo y promoción de este arte como medio para preservar la memoria visual de nuestro tiempo.
En esta tercera edición, el comité organizador se propuso dar un salto cualitativo y cuantitativo, tanto en el rediseño de la estructura general como en el mensaje que se pretende transmitir al público, potenciando el intercambio de experiencias mediante encuentros entre fotógrafos profesionales y aficionados, investigadores, promotores culturales y amantes de la fotografía de Cuba, América Latina y el resto del mundo, siguiendo el espíritu que ha caracterizado a la Jornada desde su génesis.
A tales efectos, se crearon cuatro exposiciones concebidas como espacios fijos, que abordarán una temática diferente en cada edición.
El primero de ellos es La Mirada, y consiste en una muestra con carácter investigativo o antológico. En esta ocasión se abordó «La Seducción de la mirada, fotografía del cuerpo en Cuba: (1920 -2011)», apoyada por una investigación de Rafael Acosta de Arriba, quien fungió como curador.
En segundo lugar está Joyas de Archivo, espacio a través del cual la Fototeca Histórica de la Oficina del Historiador exhibirá parte del patrimonio de sus fondos. Con curaduría de la directora de la institución, Gloria Álvarez, la muestra de esta edición estableció un diálogo entre las obras de Joaquín Blez y de Karoll [Luis del Cueto], quienes centraron su atención en el cuerpo femenino y masculino respectivamente, en la primera mitad del siglo XX.
Con el nombre de Identitario, la tercera de las nuevas propuestas refleja el quehacer fotográfico que se realiza fuera de la capital del país. Así, se organizó la exposición «Proyecto para una imagen de puente, fotografía artística en Matanzas», curada por Helga
Montalván con el apoyo del Centro Provincial de Artes Visuales de esa provincia.
Insertos también en esa dinámica de unidad y transformación, se mantienen los espacios tradicionales que han identificado a la Jornada Fotográfica.
Muestra plural del quehacer artístico nacional, Ámbito 21 constituye el cuarto de los espacios expositivos permanentes, pues desde esta edición se organiza alrededor de un eje temático a manera de diálogo con la muestra central.
En esta oportunidad «Mujer: ¿Objeto o Sujeto?» fue el tema escogido por su curadora Liset Valderrama, aunando artistas muy jóvenes con otros de larga trayectoria.
Otra de las muestras con amplia acogida de público fue «Foto Clips», que devino homenaje al programa Instantáneas de Canal Habana, espacio dedicado a la promoción de noveles exponentes de la fotografía.
Es válido destacar el Encuentro Teórico, que sesionó con una notable presencia nacional y extranjera, procedente de centros universitarios. Conferencias, mesas redondas, charlas y presentaciones de portafolios enriquecieron el debate, pródigo por su variedad temática y discursiva, así como por el contacto con creadores de la talla de Ernesto Fernández Nogueras, a quien se rindió merecido homenaje en su condición de Premio Nacional de Artes Plásticas 2011.
El fortalecimiento y ampliación de los vínculos de la Jornada con sus similares en el continente americano se materializó con seis muestras internacionales que reflejaron la actividad fotográfica en la región. En este sentido, participaron nuevamente los proyectos colectivos Ciudad Compartida, de Venezuela, y la Fundación Casa de la Fotografía del Sureste, de México, además del colombiano Iván Recalde.
Nuevas asociaciones estuvieron presentes en esta edición, que, como se dijo, busca ampliar sus horizontes: el Festival Hercule Florence, de Brasil, y el proyecto Visión Compartida de Cuba y Estados Unidos, de la asociación de amistad San Agustín-Baracoa, con un acercamiento a la ciudad primada de Cuba.
Entre las muestras internacionales, vale destacar «Mujer», del japonés Masaya Nakamura, quien es considerado el más significativo artista del desnudo artístico en su país durante la década del 70 del pasado siglo.
Una vez más se presentó «Galería por un día», de la Escuela de Fotografía Creativa de La Habana, como cierre de la III Jornada Fotográfica Latinoamericana, en la que confluyeron visiones antropológicas, exploraciones técnicas, confrontación entre clásicos y nuevos métodos, entre lo tradicional y lo contemporáneo, diálogo entre el hacer y el pensar, reunión de viejos y nuevos amigos...Un momento para confrontar la riqueza de este arte en nuestro continente, para reconocer la unidad en la diversidad; un espacio para el desarrollo
de la Fotografía como patrimonio de nuestros pueblos.
Néstor Martí
Fotógrafo e historiador del arte
Imagen superior: Durante la III Jornada Fotográfica Latinoamericana se reconoció el quehacer de Ernesto Fernández Nogueras (La Habana, 1939), segundo fotógrafo cubano en obtener la condición de Premio Nacional de Artes Plásticas, en 2011. El homenaje incluyó una conferencia del artista, en la cual refirió momentos significativos de su carrera como fotorreportero por más de medio siglo. Entre los espacios expositivos de la III Jornada estuvieron «Ámbito 21» (imagen inferior derecha), que aunó obras de 47 artistas de varios paises, y «La Mirada» (imagen inferior izquierda), devenido antología fotográfica del desnudo artístico en Cuba. |