El libro Dialogar, dialogar (Escuchar, enseñar, afirmar, aprender), del recién fallecido intelectual y revolucionario Alfredo Guevara (1925-2013), fue presentado este martes en el Pabellón Cuba. En sus intervenciones, Ricardo Alarcón, Eduardo Torres Cuevas, Fernando Martínez Heredia y Jaime Gómez Triana, vicepresidente de la Asociación Hermanos Saíz, ponderaron la trascendencia del volumen: compendio de los intercambios, conferencias y debates que sostuvieran Guevara y los jóvenes durante los últimos años en universidades, centros educativos y otras instituciones.

Hasta mediados de mayo, los visitantes podrán apreciar en el Museo de la Orfebrería la exposición «II Salón de Bisutería Misceláneas» de la Asociación Cubana de Artesanos Artistas (ACAA). La muestra la integran piezas presentadas al evento y, en especial, las merecedoras de los primeros galardones, entre ellas: collares, pendientes, pulseras, peinetas y rosarios, evidencia de la diversidad de materiales (piedras, metales nobles, nácar, tejidos, plumas, conchas), así como la variedad de diseños y técnicas en un uso pleno de la creatividad y el buen gusto de sus realizadores, características que legitiman el valor estético de esta variante de la joyería.

En los contextos arqueológicos de La Habana colonial, aun en los más antiguos que datan del siglo XVI, se encuentran frascos de farmacia, botes de tocador, fragmentos de platos, fuentes, jarros y botellas para vinos; piezas que el público puede apreciar, hasta octubre, en la muestra transitoria «Objetos franceses de La Habana colonial», inaugurada el miércoles, 24 de abril, en el Museo de Arqueología. Recuperadas por especialistas del Gabinete de Arqueología y del Grupo de Arqueología de la empresa Puerto Carenas, de la Oficina del Historiador, estos vestigios del pasado hoy forman parte de las colecciones del propio Museo, la Casa Víctor Hugo y la Farmacia Habanera.

Figura cimera de la intelectualidad cubana, Alfredo Guevara (La Habana, 1925) falleció en la mañana de hoy, 19 de abril, a causa de un infarto cardiaco. Su impronta a favor del desarrollo del arte cubano más genuino, iniciada en la década de 1950 con la Sociedad Cultural Nuestro Tiempo, tiene su máximo exponente en el Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano, del cual fue fundador y presidente. Era Profesor Emérito del Instituto Superior de Arte, que le confirió el título de Doctor Honoris Causa en Arte. Ostentaba, entre otros, el Premio de la Latinidad por su contribución a la cultura nacional y al desarrollo y la difusión del cine latinoamericano y caribeño.