El 13 de octubre de 1936, la mariposa blanca es nombrada Flor Nacional de Cuba. Justamente ese día, pero 75 años después, especialistas y aficionados a la botánica rememoraron el suceso en el mismo escenario de la Quinta de los Molinos, entonces Jardín Botánico de La Habana.

Durante  el acto de recordación se dieron a conocer los resultados del concurso La Flor de la Mariposa, convocado por el Jardín Quinta de los Molinos.

Los botánicos la nombran Hedychium coronarium Koenig, en Nicaragua se le conoce como caña de ámbar, y, tal vez porque la disposición de sus pétalos recuerda a los lepidópteros de igual nombre, para los cubanos es, sencillamente, la flor de la mariposa.
Su origen asiático no impidió que en octubre de 1936 un grupo de especialistas reunidos en el entonces Jardín Botánico de La Habana, actual Quinta de los Molinos, la seleccionaran como la flor nacional de Cuba.
Esta iniciativa estuvo motivada por el llamado de la República de Argentina para incluir en el Jardín de la Paz de Mar del Plata, que sería fundado el 19 de noviembre de 1936, la flor nacional cubana, junto con la de otros países de diversos continentes.
El  simbolismo adquirido durante las guerras independentistas del siglo XIX, cuando las mujeres escondían entre  las espatas de la espiga los mensajes destinados a las tropas del Ejército Libertador, así como la popularidad de la que gozaba entre las flores ornamentales y/o de corte, fueron aspectos decisivos para elegirla mediante votación.
Integrada por 11 botánicos y personas vinculadas a esta ciencia, una comisión nombrada por la antigua Sociedad Cubana de Historia Natural analizó las seis propuestas presentadas y decidió realizar una votación secreta en la que cada miembro escribiera, en orden de prioridad, el nombre de las plantas seleccionadas, otorgando, además, una puntuación descendente de 6, 5,4… puntos a cada una de ellas. Así, la mariposa blanca obtuvo el primer lugar con 52 puntos, seguida del galán de noche, que obtuvo 49; el jacinto de agua, 39; el lirio San Juan, 35; el aguinaldo, 32, y el garbancillo 24.
Una tarja alegórica quedó develada este 13 de octubre, al cumplirse 75 años del nombramiento en el que intervinieron el entonces director de la Sección de Botánica de la Sociedad, el religioso francés Joseph Silvestre (Hermano León), como presidente de la comisión; Carlos Guillermo Aguayo, Antonio Ponce de León, Juan Tomás Roig, María Teresa Álvarez, Luisa María Alvira, Felipe Mencía, Isidoro Castellanos, Luis Scaramuzza, L. Fors y L. García Montes.
La conferencia La mariposa blanca: flor nacional de Cuba, impartida por la Dra. en Ciencias Biológicas Cristina M. Panfet; la donación y siembra de un árbol traido del Bosque Martiano de Ariguanabo, así como la premiación del concurso La Flor de la Mariposa, sirvieron para recordar ese hecho, que enriqueció el acervo patriótico cubano al incorporar uno de sus atributos más genuinos.



En el Sendero de las Mariposas quedó develada la tarja que recuerda el nombramiento de la mariposa como flor nacional de Cuba, hace 75 años (imagen superior). La Dra. en Ciencias Biológicas Cristina M. Panfet (imagen izquierda) explicó algunas características de esta planta durante la conferencia impartida en la Quinta de los Molinos. También se dieron a conocer los resultados del concurso La flor de la mariposa. En la foto, Leonardo Pascual, director de la institución, entrega el Gran Premio de Artes Plásticas a Rodolfo Díaz Yglesias, quien presentó un trabajo compuesto por 75 mariposas de papel, realizadas con la técnica de origami.

 

Celia María González
Opus Habana

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