En conmemoración a los 70 años de la muerte del escritor italiano Gabriele D' Annunzio y como parte de la XI Semana de la Cultura Italiana que se celebra por estos días en La Habana, se dieron cita en el majestuoso Oratorio San Felipe de Neri, especialistas cubanos e italianos para disertar sobre la vida y la obra de ese intelectual italiano. El historiador y diplomático Murizio Enrico Serra y la actriz Daniela Mucini, por la parte italiana, así como la profesora universitaria Mayerín Bello y el Premio Nacional de Literatura, el poeta César López, protagonizaron el panel Gabriele D'Annunzio, literato y político, un acercamiento a una figura en la cual el amor y la vitalidad signaron gran parte de su ejecutoria intelectual y política.
Dedicada al 150 aniversario del natalicio del compositor Giacomo Puccini (1858-2008) y al 70 de la muerte del escritor Gabriele D' Annunzio, la celebración de la XI Semana de la Cultura Italiana en Cuba incluyó, el pasado martes 25 de noviembre, el panel Gabriele D'Annunzio, literato y político que sesionó en el Oratorio San Felipe de Neri con la presencia de especialistas italianos y cubanos.
El embajador de Italia en Cuba, Excmo. Sr. Domenico Vecchioni, inauguró el panel Gabriele D'Annunzio, literato y político, al que concurrieron, por la parte italiana, Maurizio Enrico Serra, historiador, diplomático
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| Gabriele D'Annunzio (1863–1938) Novelista, poeta y dramaturgo italiano. Entre sus novelas se encuentra El inocente, que Luchino Visconti llevó a la gran pantalla. |
y crítico y la actriz Daniela Mucini; por la parte cubana, intervinieron la profesora universitaria Mayerín Bello y el poeta, Premio Nacional de Literatura, César López, con ponencias sobre aspectos destacables de la trayectoria literaria del novelista, poeta y dramaturgo nacido en Pescara, el 12 de marzo de 1863.
De variopinta calificó la profesora Bello la literatura dannunciana y destacó la habilidad de aprovechar las opciones estilísticas en boga en la época, para colocar a la literatura italiana en el universo cultural europeo de finales del siglo XIX y principios del XX. Mezcla de naturalismo, realismo, psicologismo, parnasianismo y romanticismo, las obras del escritor italiano brillan por la búsqueda de lo novedoso, lo artificial, lo refinado, con un matiz de neurosis, pesimismo y vitalidad que la particulariza entre sus contemporáneos. Desde su primera novela, Il Piacere (El Placer), de 1889, se perfila la constante experimentación en los modos expresivos de cada uno de los géneros que cultivó (novela, poesía, teatro) con un toque de lirismo y recreación plástica de escenarios y personalidades que subraya la musicalidad y visualidad de una estética absolutamente genuina.
Ese ser excéntrico, transgresor y aventurero, en opinión del crítico Maurizio E. Serra, se distinguió la extraordinaria vitalidad que manaba de cada uno de las circunstancias de su vida y de cada obra que salió de su pluma. Hombre de gran meticulosidad y empeño, trazó su producción literaria con un sentido moral, de superioridad individualista que lo hizo interesante a los ojos de importantes intelectuales como el cubano Aurelio Boza Masvidal, quien escribió un trabajo sobre el autor italiano en 1956. La importancia de la música en la poesía dannunciana, según Serra, permitió que D'Annunzio proyectara varias óperas con Giacomo Puccini entre 1896 y 1902.
Como colofón a la disertación de César López sobre la influencia literaria dannunciana en escritores cubanos y la presentación de Danila Mucini, quien musicalizó imágenes de sus musas y declamó poemas del bardo, el también escritor y vicepresidente de la UNEAC, Senel Paz, presentó una plaquette de poemas de Gabriele D'Annunzio, en edición homenaje bilingüe por los 70 años de su fallecimiento, titulada Leves mis palabras en la tarde, gracias a la colaboración de la Editorial Letras Cubanas, del Instituto Cubano del Libro, la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC), la Embajada de Italia en Cuba y del pintor cubano Arturo Montoto, quien ilustró el texto con algunos de sus dibujos.
Personaje controvertido de las letras y la política italiana, Gabriele D'Annunzio tuvo una notoria participación en la 1ra Guerra Mundial, entre 1914 y 1918. Después del cese del conflicto se refugia en su lujosa villa del Lago de Garda, donde continúa escribiendo y fallece el 1º de marzo de 1938, 11 días antes de su 75 cumpleaños.
Rodolfo Zamora Rielo
Opus Habana