Dedicado a la poesía de las lenguas originarias y a la asiática, del 26 al 31 de mayo, el Centro Histórico acoge el XIII Festival Internacional de poesía. El martes 27, en la Basílica Menor de San Francisco de Asís, será el concierto inaugural, en tanto, del jueves 29 al sábado 31, servirán como espacios para lecturas de poemas, las Casas de la Poesía, del Benemérito de las Américas Benito Juárez, de Asia, de los Árabes, Simón Bolívar, Oswaldo Guayasamín, así como los parques Rumiñahui, Simón Bolívar y Hans Christian Andersen, además de la galería de la biblioteca pública Rubén Martínez Villena y el patio del Palacio del Segundo Cabo.

 La exposición «Diálogo con la materia y el tiempo», del artista Yosvany Martínez, se exhibe en el restaurante El Templete de la Compañía Habaguanex S.A. En las palabras del catálogo, el crítico de arte Toni Piñera comenta: «Los estratos ocultos bajo la contenida gama de colores contrastados sobre la materia (ya sea pajilla, cartón, tela…), encierran toda una trayectoria orientada a definir y acotar los límites de una pintura que surge como relación directa entre materia, orden y sensualidad. Todos esos elementos hablan de cómo la pintura puede ser ella misma y avanzar en su proceso de autoafirmación asimilando materiales de dominios incorporados a nuestro entorno…»

 El 113 aniversario de caída en combate en Dos Ríos, a la edad de 42 años, de José Martí, Apóstol de la Independencia y Héroe Nacional de Cuba, fue conmemorado este lunes 19 de mayo en un acto que tuvo lugar en el Parque Central ante la estatua erigida en su honor en 1905. «Maestro no has muerto, vives en el corazón de todos nosotros, los tiempos pasarán, los niños se harán padres, y se harán abuelos y por generaciones enseñarán que Cuba tuvo su Apóstol, tuvo su Maestro...», expresó el Historiador de la Ciudad, Eusebio Leal Spengler, al evocar a Martí. Los asistentes fueron fundamentalmente alumnos de las escuelas José Martí y Concepción Arenal.

 Eusebio Leal Spengler inauguró este jueves 15 el hotel Marqués de Prado Ameno que, ubicado en la calle O´Reilly entre Cuba y Aguiar, atesora valores patrimoniales como la decoración de su interior con restauradas pinturas murales de los siglos XVIII y XIX, cuando la otrora mansión fuera habitada por esa ilustre familia que le da nombre ahora a la instalación. El criterio de intervención tuvo en cuenta la comunicación de este inmueble con el hotel Florida, situado en la misma posición, pero con entrada por la calle Obispo. Se trata —explicó Leal— de dos exponentes de la transición de una centuria a otra en la arquitectura colonial de la Isla.