En el cruce de calles que limita, por un lado, con la Lonja del Comercio y, por otro, con el edificio Casteleiro Vizoso, se halla una columna de granito silvestre, denominada cruceiro, donada a la ciudad por el señor presidente de la Xunta de Galicia, Manuel Fraga Iribarne, como parte de las actividades asociadas al proyecto «Una presencia gallega en Cuba».

 En este artículo el cronista se refiere a aquellos seres humanos que han hecho del dolor y la muerte «su manera de vivir y con ellos resuelven su problema económico, ya porque accidentalmente, de la muerte del pariente o el amigo, esperan ellos la solución o el remedio a los males de su bolsillo».

 Hace un par de años atrás en el Centro Histórico se reabrieron las puertas de la Biblioteca Pública Rubén Martínez Villena en su nueva sede de Obispo, a sólo unos metros de su anterior ubicación. Desde entonces, y en una atmósfera apacible para el aprendizaje, los usuarios acceden a los fondos bibliográficos y servicios de este inmueble habanero que tiene además un bello jardín, una galería de exposiciones, una sala teatro...
 Ya no resulta difícil imaginar las procesiones, enterramientos y demás solemnes ceremonias religiosas que pudieron sucederse en el interior de estos otrora iglesia y convento. Edificado a la orilla del mar por los frailes franciscanos, este recinto ha recuperado su sacralidad de antaño para convertirse en majestuoso templo del arte.